La consecución de grandes gestas deportivas, a veces inigualables a priori me genera un sentimiento de admiración como el que podría sentir esta mañana cuando he asistido a la entrega del trofeo MARCA Leyenda del Deporte a Javier Gómez Noya, pero hay otros deportistas con los que generas una relación mucho más especial, más allá d la admiración.
Estos son, para mi, los deportistas con los que he podido compartir mucho más que sus éxitos deportivos, deportistas con los que he convivido, con los que he compartido momentos importantes en mi vida dentro y fuera del deporte.
Natalia Rodriguez es una de ellas.
La atleta tarraconense es una de las mejores atletas y mediofondistas españolas de todos los tiempos, pero no sólo sus resultados me hacen admirarla, sino su actitud ante la vida, ante el deporte y toda la trayectoria deportiva compartida al ser casi cohetáneos.
Mis primeros recuerdos de Natalia datan del año 1994 en San Sebastián. Yo asistía a mi primer campeonato de España en pista, categoría cadete, y en la pista auxiliar de Anoeta seguí de cerca la prueba de los 1000m femeninos dónde participaban dos atletas extremeñas. La victoria fue clara para Natalia, aún cadete de primer año al ser nacida en 1979, que se impuso con una gran marca de 2:49.
A partir de ahí coincidimos en concentraciones de tecnificación de la RFEA, campeonatos nacionales, internacionales, como el Europeo junior de Lubjana (Eslovenia) dónde tuvo que superar su primer revés deportivo al caerse en la final de 1500m dónde, seguramente, hubiera disputado las medallas.
Los éxitos le han acompañado en multitud de ocasiones, también algunos malos momentos, como la final del Mundial de Berlín en la que, desde una habitación de hotel en Alicante, vimos en directo su victoria y su descalificación que no queríamos creer.
También ha sido una pionera en otras muchas cosas como la maternidad de deportistas de élite, que espero que en el menor tiempo posible, deje de ser una preocupación para muchas, y dónde Natalia demostró que se puede volver al máximo nivel y mejor aún tras esta pausa voluntaria que te hace crecer como persona y como deportista.
Este es mi pequeño homenaje desde mi blog y os dejo una estupenda entrevista publicada hace unos días y que deja bastante claro que es una deportista y persona especial:
http://thewangconnection.com/misatletas-noticias/5589-natalia-rodriguez-la-fuerza-de-la-luz
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