Vamos a empezar por el principio
¿Por qué la Madrid-Segovia?
A finales de 2018 os contaba con un vídeo cual era el plan
de mi temporada 2019 con todas las pruebas que tenía en mente. Desde luego el
calendario era intenso y había algunas pruebas que se pisaban con otras y que
decidiría en cuál participar según se fuera desarrollando la temporada y mi
nivel de forma y motivación.
Tras una primera parte de la temporada centrada en
clasificarme y preparar el mundial de Trail de la federación de atletismo, la
segunda parte de la temporada, el verano, estaría centrado en participar en las
pruebas de las Golden Trail Series de Salomon. Pruebas de altísimo nivel y más
cortas, explosivas y alpinas (DolomitysRun, Sierre-Zinal, Marathon du Montblanc
o Ring of Steal).
Finalmente los resultados en esas pruebas, aunque
interesantes, no eran tan buenos como esperaba, y tras un verano muy completo
de entrenamientos y competiciones en los Alpes decidí, tras correr la OCC del
UTMB, que no viajaría a Escocia para la última prueba.
En esa última semana de agosto se abrió la posibilidad de
plantearme participar en la Madrid-Segovia, que tenía prevista en mi
calendario.
Había entrenado bastante durante el verano, con bastante
desnivel y volúmenes entre 100-150km/semanales por lo que, aunque no hubiera
hecho una preparación ni puesta a punto específica para una prueba tan larga
como la Madrid-Segovia, pensaba que con una estrategia conservadora, podría
terminarla con buenas sensaciones.
Ese fue el objetivo, dedicar las primeras semanas de
septiembre a entrenar sin modificar los planes de trabajo, no hice tiradas
largas ni entrenamientos específicos por el recorrido de la Madrid-Segovia,
pero si estudié el recorrido sobre el track y los ritmos de carrera (A partirde la tabla de km-esfuerzo) para trazar una estrategia de carrera conservadora
y conseguir finalizar la prueba con buenas sensaciones.
NO haber hecho una preparación específica ni una puesta a
punto óptima, como un objetivo de rendimiento de la temporada, me obligaba a
establecer una estrategia conservadora de carrera con el fin de hacerme el
menor daño posible y, también, teniendo en cuenta que en dos semanas estaré en
la salida de la SkyPirineu en Bagá.
¿Cuál era el objetivo?
Tras este rollo inicial, por concretar, el objetivo de mi
participación en la Madrid-Segovia era, tener una experiencia fácil (Sin tener
que desplazarme, si una exigencia deportiva alta, NO es un campeonato oficial y
sin excesiva dificultad en el recorrido, ni desnivel ni tecnicidad) de cara a
ir probando aspectos como: estrategia de carrera, alimentación, tiempo de
carrera, etc.
Está claro que sin esa preparación específica no podía
plantearme salir a disputar al 100% la prueba, por lo que me planteaba los
siguientes objetivos:
- - Ir con la cabeza de carrera los primeros
30-40km, o más si se salía a buen ritmo.
- - Tomarme los avituallamientos con calma. Parar al
menos un minuto en todos: Sellado de la tarjeta del camino de Santiago,
rellenar botellas de agua/isotónico, comer algo.
- - Intentar correr todo el recorrido, sobre todo la
parte más exigente desde Mataelpino a la Fuenfría.
- - No ir más rápido ningún km de bajada de 4’/km
Preparación de la estrategia de ritmos.
En base a la tabla de tiempos por las referencias de
Km-Esfuerzo tomé como referencia los tiempos del ganador en 2014 que se quedó a
2’ del record de José Tabernero con 8h44. Era una referencia ya que como
comenté, mi objetivo era ir en cabeza de la prueba los primeros 30-40km fuera
el ritmo que fuera.
Lo fui consultando en cada uno de los avituallamientos para
saber cómo iba.
https://docs.google.com/spreadsheets/d/1D1sjvZmy4wlwwC7JcVpNhG7j3Qa9eokx7ltC0tmFZYg/edit?usp=sharing
Preparación de la estrategia de hidratación y
alimentación.
Sobre una previsión de 9h de carrera, la recomendación es
una ingesta de 60-75g/hora recomendada, pero en principio, al llevar una estrategia
conservadora, una de las ventajas, es que puedes relajar algo el consumo de
calorías, sobre todo teniendo en cuenta que aún estamos en un ultra relativamente
corto (9h).
Salí con unos 200g de gominolas de fructosa, unos 150g de
geles 226ers de melón con cafeína diluidos en agua en un softflask y 10 cápsulas
de sales sub9h de 226ers (la idea era 1xhora). En Cercedilla dejé un redbull
sin gas congelado que me fui bebiendo hasta la Fuenfría (Ya descongelado).
Como veis llevaba poco más de la mitad de calorías encima,
pero la idea era comer algo en cada avituallamiento de la organización y en Cercedilla
tenía una bolsa con un extra de alimentos: Geles y gominolas.
Respecto a la bebida, el objetivo era beber medio litro de
agua entre cada avituallamiento, con algo de isotónico y beber también en cada
avituallamiento. Con un total de 11 avituallamientos me iría fácil a unos 6-8 litros
de líquido que podría ampliar fácilmente bebiendo en los avituallamientos dependiendo
de las condiciones de calor/humedad. Además del líquido del softflask de los
geles y el redbull.
Preparación de material
Como el objetivo no era exprimirme al máximo y buscar las
menores secuelas posibles, aunque la Madrid-Segovia es una carrera ideal para
las Slab Ultra 2, con las que corrí en la OCC por ejemplo, decidí ser más
conservador y tirar de las Salomon Sense Ride 2 con las que entreno
habitualmente y que me dan un extra de confort y amortiguación con buen agarre
para el terreno que vamos a tratar.
A parte del calzado, mochila Slab de 5 litros para llevar
manta térmica, envases para 1,5l, frontal, móvil, alimentos, un cortavientos
fino, vaso plegable y poco más.
Dejé una bolsa para Cercedilla con ropa de cambio, por si
llovía mucho, unas zapatillas secas, Sense Ride también. Pero no tuve que usar
nada de ello.
Corrí con camiseta técnica Slab sin mangas y un pantalón
corto de 7 pulgadas, por encima de la rodilla. La sensación siempre fue de
fresco sin pasar calor en ningún momento de la prueba.
¿Cómo fue la carrera?
Vamos con la crónica del día de la prueba. La tarde del
viernes pasé por el Hotel Cuzco a recoger el dorsal. La familia se subió a
Guadarrama para no tener que madrugar y poder verme en los avituallamientos a
partir de Mataelpino o Cercedilla.
Así que a las 9pm estaba en casa solo cenándome un buen
plato de gnochi con salta al pesto y cebolla y a las 9:30 estaba ya acostado.
El reloj sonó a las 3am, desayuno habitual, café solo largo (taza)
y 3-4 tostadas de pan de cereales con mantequilla (Normalmente las tomo con
aceite pero del verano alpino me apetece más la mantequilla por ahora). Tras
revisar todo el material y mochilas y con la ropa de competición a las 4am
pillo un Zity para bajar a Plaza Castilla dónde aparco sin problemas a 100m de
la salida.
Tras dejar la mochila de Meta (Roda de cambio) y la de
Cercedilla y prepararme los geles diluidos con agua, a las 4:30 caliento un par
de kilómetros muy suave y unos 15’ antes de la salida me coloco ya en la zona
de salida para estirar un poco y charlar.
Es noche cerrada y hasta bien pasado Colmenar Viejo no
apagaremos los frontales.
A las 5am se da la salida y acompañados por las bicis que
abren carrera y un coche de la policía local, vamos recorriendo las calles de
Madrid en esos primeros compases, casi nada de tráfico y algunos trasnochadores
que vuelven a casa. Vamos un grupo de 6-8 corredores en esos primeros compases,
un poco de charla y comentando lo que nos espera y el día que hace en lo
climatológico.
En la pasada edición se salió bastante rápido, clavando los
ritmos del ganador de 2014, pero luego lo pagaron mucho al final por lo que Jaime,
Hugo y demás corredores de cabeza deciden este año salir más tranquilos y yo me
dejo llevar.
En 1h15 llegamos a la pasarela que da acceso al
avituallamiento de 3Cantos, Jaime me dice que el año pasado llegaron ahí mucho
más rápido, sobre 1h10, vamos tranquilos un grupo de unos 6 corredores. Me
entretengo en el avituallamiento como tenía previsto y salgo 4-5 del mismo,
pero poco a poco por el carril bici de Colmenar nos volvemos a agrupar 5
corredores.
Las tormentas del día anterior hacen que un río que cruzamos
varias veces esté con bastante agua y nos toca mojarnos los pies un poco.
Llegamos a Colmenar Viejo 5 corredores en 2h07, el parcial
de referencia que llevaba marcado daba ese paso en 2 horas peladas por lo que
vamos unos 7’ más despacio en 26km. De nuevo avituallamiento, sello, rellenar
agua, comer algo de melón/sandía y unas galletas y seguimos.
Al salir de Colmenar tomamos un camino con algo de piedras,
me coloco delante del grupo siguiendo a la bici que abre carrera y parece que
nos estiramos un poco aunque en el avituallamiento del puente Medieval nos volvemos
a juntar los 5 corredores ya de día nos quitamos el frontal.
Al salir del puente medieval comienzo a avivar el ritmo, ya
sólo tenemos una bici que abre carrera y nos llevará hasta Segovia, buena
paliza para el voluntario, me escapo un poco pero al mirar atrás sigo viendo al
resto de corredores.
2h43 fue el paso por Puente Medieval, ahí no hay referencias
de paso de tiempo pero por la tabla de km-esfuerzo, el ganador en 2014 pasaría
en 2h35 por lo que voy +8’ de retraso.
A Manzanares el Real llego ya en solitario, aunque cuando
salgo del avituallamiento ya llegan el 2º y 3er corredor juntos y se ve venir
al 4º-5º (Jaime uno de ellos). 3h23 el paso por este punto, empiezo a recortar
tiempo respecto a las referencias de km-esfuerzo del ganador en 2014 que hizo
8h44, por su referencia él pasaría por este punto en 3h18 por lo que voy +5
minutos.
No quiero acelerar mucho el ritmo, noto un poco de fatiga muscular
y mucha tensión, espero no tener problemas de calambres, intento correr suelto
y no lanzarme mucho en las bajadas con la referencia de no bajar de 4’/km pero
ya empiezo a coger mi ritmo hasta Mataelpino que es dónde empezará la carrera
de verdad con las subidas más fuertes.
Foto: Claudio Luna |
Llego a Mataelpino en solitario con 4h clavadas, aquí el
paso de 2014 fue de 3h52 por lo que vuelvo a estar +8’, pero no me preocupa, se
que en las subidas, si las hago 100% corriendo, que es el plan, recortaré
tiempo en los siguientes tramos de subida a la Barranca.
A partir de Mataelpino comienzan los tramos duros, buenas
subidas para subir de Mataelpino y por el camino paralelo a la M607 y más aún
cuando tomamos la pista de la Barranca, terreno bien conocido, 3km de subida hasta
el parking donde estará el avituallamiento que hago a buen ritmo en torno a 6’/km
o algo más rápido.
En el avituallamiento de la Barranca está Amaya que me da ánimos,
le comento que voy muscularmente con un poco de tensión, pero voy bien en
general, paro, sello, como, bebo, relleno la botella de agua y a seguir. 4h45
el paso por el avituallamiento de la Barranca, el paso de referencia de 2014
hubiera sido, de mantener el ritmo, 4h41, por lo que le he recortado 4’ en esa
subida desde Mataelpino.
Tras salir de la carretera de la Barranca, una buena subida
antes de cruzar la M601 por la Fonda Real y hacia abajo a Cercedilla. Me tomo
con calma la bajada a Cercedilla y llego con buenas sensaciones, se que lo más
duro será el tramo siguiente hasta la Fuenfría así que me tomo con calma ese
avituallamiento parando unos 3 minutos.
Muchas caras conocidas en Cercedilla, pero hay que seguir
adelante, cruzo Cercedilla, un recorrido por sus calles que he hecho varias
veces, al pasar por la plaza del ayuntamiento me acuerdo mi debut en la primera
carrera de montaña que corrí en 2014, la Cercedilla Trail Race, sigo tranquilo hacia
la estación de tren, allí tomaré la carretera hacia las dehesas y comenzará lo
duro. Estoy mentalizado de ello, quiero correr y mantener un buen paso, sin
cebarme, pero sin relajarme, aunque vaya a buen ritmo se que me queda una hora
o más por delante de esfuerzo continuo.
Cruzo la zona de las dehesas antes de tomar la Carretera de
la República y disfruto de los ánimos de Amaya y las peques, comienza el
terreno más tendido por la carretera, se suaviza algo la pendiente y el firme
es muy bueno, mantengo la marcha aunque me puedo tomar un pequeño descanso en
el avituallamiento que han montado en la bifurcación de la calzada romana. De
ahí a la Fuenfría son 8kms y me restan unos 300-400m positivos, echo cuentas, a
6’km llegaría a la Fuenfría por debajo de 6h45 por lo que podría pelear por el
record de la prueba. La proyección del ritmo de mi paso por Cercedilla me dice
que debería llegar a la Fuenfría en 6h48, estoy en el tiempo e incluso le gané
algo en el primer tramo de subida así que sigo concentrado.
Delante de mí a 40-50 marcha la bici que abre carrera, no
mira atrás, sabe que vengo y le toca exprimirse en la subida para que no le
pille. Voy mirando el reloj de vez en cuando, me cruco con senderistas y grupos
que están de excursión, y me sorprendo con parciales más cerca de los 5’/km de
lo esperado, voy rápido, no noto tanto la pendiente, aunque los kilómetros
hacen mella, voy camino del km80 y sigo corriendo.
A 2km de la Fuenfría está animándome David López Castán, me
dice que ya me queda poco, eso espero, estoy deseando llegar al avituallamiento
para tomarme un respiro del esfuerzo de la subida con un pulso que voy marcando
en torno a las 175p, el más alto de toda la prueba en la que siempre he rondado
entre los 145-165p.
Llego a la Fuenfría, 6h36 marca mi reloj, me animan, saben
que la bajada será en menos de 2h si no pasa nada y que el record lo tengo,
hago mi rutina: sello, bebo, relleno la botella, como algo y descanso un poco
más mirando las referencias en el móvil. Con ese paso de 6h36 me da una
proyección en meta por debajo de las 8h15, pero se que lo que resta es bajada y
seguro que pierdo algo de esa referencia, es más fácil ganar en subida con las
referencias de km-esfuerzo. Me animan antes de partir, Sergio Mayayo me dice
que haré 8h20, yo le digo, precavido, que más 8h25 que 20, pero arranco en
bajada.
La pista que sale de la Fuenfría hacia Segovia es tendida,
se corre a gusto, aunque los primeros kilómetros tiene bastantes piedras,
mantengo mi marche sin bajar de 4’/km sin lanzarme, van cayendo kms a 4:10-4:15.
Luego la carretera se estabiliza y aprovecho para pisar en la zona cubierta de
pinaza, húmeda de las lluvias, y que amortigua mi apoyo reduciendo el dolor que
me invade tras más de 80kms en cada apoyo.
Ya sólo hay que pensar en avanzar, el ritmo de carrera se
mantienen, me encuentro bien y sólo noto los dolores musculares y articulares
del tiempo de carrera, calculo sobre 1h45 a meta, unos 22-23km así que intento
distraerme.
Disfruto del paisaje boscoso de la zona segoviana, de los
ciclistas que nos cruzamos en sentido contrario y que preguntan al ciclista que
abre carrera si soy el primero de la Madrid Segovia.
En los avituallamientos, caras conocidas como la de Elena
Ugena, aprovecho para parar tranquilo, cada vez me cuesta más arrancar, tardo
50-100m en coger otra vez el ritmo crucero de 4’ poco, pero prefiero parar y
disfrutar de los avituallamientos, sigo bebiendo, comiendo, aunque ya me voy
relajando, desde la Fuenfría ya no tomo sales, me encuentro bien dentro de la
fatiga.
Pasamos el último avituallamiento en Riofrío, menos de 8km a
meta, por las referencias sigo pensando en 8h25 de carrera pero seguro que será
algo menos, siguen cayendo los kilómetros por el entorno de Segovia, cruzamos
la circunvalación por debajo y se que estoy en Segovia, algún aficionado nos
espera y anima, pido referencias, menos de un kilómetro a meta y ya por las
calles de Segovia, con muchas ganas de llegar, me relajo un poco ese último km,
avanzamos por las aceras, esquivando a los segovianos y turistas que disfrutan
de un sábado con un tiempo apacible, aunque no soleado, as nubes nos han
acompañado toda la carrera pero la lluvia nos ha respectado hasta ese momento.
Foto: Claudio Luna |
Y por fín entrada en meta dejando el acueducto romano a la
derecha y detrás, coger de la mano a mis peques para entrar juntos en meta en
8h20:41, mucho mejor de lo esperado, pero el día, las sensaciones y todo
acompañó para eso minutos crecieran más de lo esperado.
Por supuesto, tras descansar un poco, entrevista y ducha,
tocó comerse unos judiones de la granja y un cochinillo segoviano al horno
antes de la entrega de trofeo junto a Jaime y a Hugo.
Espero haber respondido la mayoría de las cuestiones que me
han volcado en Instagram y Facebook, si no me lo repreguntáis aquí en el Blog 😉
Bravo, Bravo,👏👏👏
ResponderEliminarGracias por tu crónica, tomamos nota y aprenderemos de tu experiencia.
👏👏👏
Muchas gracias por leerlo y por el comentario ;-)
EliminarQue placer leerte Pablo, a seguir corriendo para que disfrutemos en la lectura ;)
ResponderEliminarEnhorabuena de parte de uno que no pudo pasar de Cercedilla ;)
ResponderEliminarPerdona Pablo, veo que en tu crónica dices que en Cercedilla dejaste un redbull congelado. No sabía que existía este tipo de Redbull, y yo que soy de estómago delicado y no soporto el gas me vendría de perlas ¿Qué redbull es, el SHOT? Porque he buscado por internet y no encuentro nada al respecto.
ResponderEliminarY enhorabuena por tu victoria, pero sobre todo por no perder la sonrisa de principio a fin después del pedazo de esfuerzo.
Un saludo
Hola! Perdona que no me expliqué bien. En Cercedilla habia dejado en mi bolsa de avituallamiento que me lkevaron allí un redbull, pero lo que hice fue con un redbull normal, lo vacié en una botella de plástico de 50cl, lo removí varias veces para quitarle gas y luego lo congelé en casa. Por la mañana lo dejé en la bolsa y cuando llegué a Cercedilla estaba líquido pero fresquito para tomármelo ;-)
EliminarUn saludo
Ahora si me enteré y tiene sentido el que no encontrase ningun redbull sin gas en los supermercados jajaja. Gracias!!! Un saludo
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