Como sabéis comparto entrenamientos con Chema Martínez (@chemitamartinez) desde hace unos años bajo la batuta de Antonio Serrano. Ya con anterioridad habíamos compartido sesiones de entrenamiento en la Blume, desde mi llegada a Madrid, y en competiciones en las que habíamos coincidido.
Chema es una persona especial, no sólo un gran atleta y deportista, por eso puedo decir que para mi es una referencia en muchos aspectos.
Este año, con 40 años cumplidos, Chema sigue bajando a la pista con la ilusión y la energía de siempre. Es consciente de sus posibles limitaciones pero lucha contra ellas cada día y, os puedo asegurar, que no nos deja mucho margen en los entrenamientos y menos en las competiciones, para mojarle la oreja.
Estos últimos días y semanas, es habitual que me pregunten por Chema, si creo que estará en la pelea por una plaza para los JJOO de Londres, si pienso que aún tiene un cartucho en sus piernas para darnos una alegría en la maratón.
A Chema lo veo entrenar habitualmente, a veces me toca sufrir con él… y otras no puedo seguir su estela.
Él tiene claro que es su reto, Londres, la maratón, tanto es así que junto con el periodista de Marca Andres García Armero (@andresgarmero) han puesto en marcha un Blog “EL ÚLTIMO GRAN ASALTO” en el que Chema nos contará sus vicisitudes durante estas próximas 8 semanas que faltan hasta la maratón de Barcelona (@maratobarcelona) en la que espera conseguir la marca mínima de participación en los JJOO y, además, un crono que le permita estar dentro de esa selección olímpica ya que sólo 3 atletas podrán salir a competir en la maratón de los JJOO de Londres.
Parte del reto lo conforma que nuestro intrépido periodista también preparará dicha maratón de Barcelona, claro está, con otros objetivos cronométricos, aunque también ambiciosos ya que busca romper la barrera de las 3h30. Para eso le estamos ayudando como preparados personal a través de la Escuela del Corredor de la AD Marathon que hemos puesto en marcha este año (@entrenaADM)
Por mi parte ya me voy recuperando de mis problemas con el tiroides y poco a poco podemos ir exprimiendo el organismo para afinar el tono y la forma de cara a correr una maratón en el mes de abril y poder estar también “en la pomada” de los Juegos Olímpicos, aunque para mi, espero, no sea el último asalto ;-) Los Europeos de Zurich en 2014 son una gran motivación a largo plazo.
Pero para todos aquellos que me preguntan por Chema, si creo que va a llegar a Barcelona, comentaros la sesión de entrenamiento de hoy en la que Javi Guerra y yo le hemos ayudado a completar un entrenamiento, el primero específico de maratón, con el que demuestra que está en condiciones para luchar en ese “último gran asalto”.
Terminábamos de calentar cuando Chema aparecía por la rama que da acceso a las pistas de la Blume, una hora de carrera en progresión por la casa de campo iban ya en la mochila, por delante 15km más en el artificial de la Blume en plan tirada con avituallamientos, probando geles, bebiendo en carrera.
A las pocas vueltas Javi Guerra se una a Chema, su intención, marcarle el ritmo los siguientes 12,5 kilómetros, 25 vueltas al anillo de césped artificial de la Blume, al poco empiezo yo mi entrenamiento, 6x1500 (3 vueltas) en las que intentaba liberar a Javi de tirar todo el rato aunque a veces me tenía que poner a rebufo. Mi recuperación, lo que ellos tardaban en dar una vuelta, 1 minuto y 30 segundos, mis tiempo: 4:38, 4:35, 4:32, 4:30, 4:29 y 4:23 aunque me escapé un poco al final y a Chema y Javi ya sólo les faltaba una vuelta para acabar, Chema, en 46:04 esos 15km en un total de tirada de 31…
No se vosotros, pero yo contaría con Chema en su “ÚLTIMO GRAN ASALTO”
Pablo, para los que amamos el atletismo y las largas distancias, es un lujo leerte y una suerte conocer los entresijos de los entrenamientos y motivaciones de nuestros campeones. Felicidades y... ¡caray con vuestros entrenos!
ResponderEliminarGracias Antonio, y nosotros encantados de compartirlo con vosotros ;-)
ResponderEliminarPues sí que va fuerte el maestro. Tendrás que ponerte las pilas...Mucho ánimo, Pablo. Con rivales así, se saborea mejor el triunfo...
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